El enorme costo humano, económico y social de las enfermedades cardiovasculares estos hace que la salud del enemigo no. 1 en los países desarrollados. Todas las estrategias de prevención y lucha contra estas enfermedades son invariablemente, modificando los hábitos de vida.
Las
enfermedades cardiovasculares son un conjunto de trastornos de diferente
Génesis y localización, que puede prevenirse como tal, es decir, juntos, a
través de medidas de prevención primaria. La estrategia común se orienta hacia
la modificación de conducta y estilo de vida de la población. Este cambio de
estilo de vida es la respuesta para quienes están en mayor riesgo de estas
enfermedades o para aquellos que ya sufren.
ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN
Las
estrategias de prevención y lucha contra las enfermedades cardiovasculares de
la Organización Mundial de la salud están orientado a tres vectores: población
general, población de alto riesgo y prevención secundaria.
La
primera línea de acción está dirigida a la población en general, que pretende
modificar estilo de vida, las características ambientales y los determinantes
sociales y económicos subyacentes de las enfermedades cardiovasculares.
La
segunda línea estratégica, por su parte, pretende facilitar y mejorar la
atención preventiva a todos los temas que están especialmente expuestos, la
población de alto riesgo supuesto.
La última
estrategia busca evitar la repetición y la evolución de la enfermedad en
personas ya afectadas.
Estas
estrategias se pueden aplicar a todos los problemas cardiovasculares, pero en
particular hipertensión isquémica cardiopatía-angina de pecho e infarto de miocardio-,
fiebre reumática y cardiopatía reumática crónica.
CAUSA DE MUERTE TEMPRANA
Las
enfermedades cardiovasculares son una causa importante de muerte prematura y la
morbilidad evitable, que va en aumento en nuestro país. Lo más importante, en
este contexto, es la enfermedad cardíaca isquémica y accidentes
cardiovasculares. Ambas están estrechamente relacionadas con la hipertensión
arterial.
Si bien
es cierto que la fiebre reumática y cardiopatía reumática disminuyeron en los
últimos 50 años, por el contrario, la incidencia de cardiopatía isquémica se ha
incrementado, como resultado de la industrialización y el estilo de vida
asociados a la misma.
Los
estudios científicos y epidemiológico muestran que casi todas las enfermedades
cardiovasculares se pueden prevenir, ya que toda la comunidad participa en la
modificación de los determinantes elementos de factores de riesgo.
Una de
las medidas preventivas en relación con el grado de desarrollo socio-económico,
salud de población. Por ejemplo, fiebre reumática y su secuela, cardiopatía
reumática – está fuertemente ligada a la pobreza y el subdesarrollo. Esta
enfermedad que ya ha desaparecido prácticamente en los países desarrollados,
entre ellos, Portugal-, incluso aunque tenga corazones de incidencia, entre los
sectores más desfavorecidos de la población.
Atacantes de corazón
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Oleh
Mi Venezuela